Hace dos semanas hablé sobre lo que me había parecido el primero de los dos capítulos adicionales de GTAIV, titulado The Lost and Dammed, y hoy toca hacer lo propio con el segundo y último (al menos por ahora) de los capítulos adicionales, de nombre The Ballad of Gay Tony.
De entrada, y como ya me habían dicho, este segunda episodio es muy superior al primero en todos sus aspectos jugables, pues al contrario de lo que ocurría en The Lost and Dammen, que era tremendamente repetitivo, The Ballad of Gay Tony es original en todas y cada una de sus misiones, nunca sabes que vas a tener que hacer, desde lo más básico como simplemente huir de algún lugar o eliminar a ciertos objetivos (en esto se basaba el 90% de The Lost and Dammed), hasta lo más espectacular como pueda ser robar un tanque mientras un helicóptero lo está transportando, o hacerce con un helicóptero de combate que se encuentra en un yate enorme para después eliminar dicho yate y a sus ocupantes, o una fase de absoluta acción subidos en el techo del metro, tender emboscadas a la policia, asustar a un tipejo arrojándolo desde el cielo para después saltar nosotros, agarrarle y soltar el paracaídas antes de estrellarnos contra el suelo, o dejando a un lado la acción, podemos vigilar que todo vaya bien en nuestro local nocturno, o competir en ver quién bebe más, o bailar en la pista, etc etc... En definitiva, las posibilidades de The Ballad of Gay Tony son infinitas, casi tantas como las vistas en el GTAIV original, de hecho, tiene aspectos como el del paracaídas que dicho juego no tenía, y que es de lo más divertido.
Ahora vamos a su argumento, en el que tenemos como protagonista a Luis López, un dominicano que ha pasado varios año en la cárcel y ahora se gana la vida gestionando dos locales nocturnos, uno homosexual y otro heterosexual, siempre con la ayuda de su socio Tony Prince, al cual considera como de la familia, y hará lo que sea por él. Y ahí es donde empieza todo, pues Tony se mete en algunos líos que poco a poco irán aumentando, y Luis será el encargado de ir solucionándolo todo.
La duración del juego es muy extensa, aproximadamente el doble que The Lost and Dammed, y aunque sea mucho más corto que el GTAIV original, el hecho de que sea una expansión hace que dicha duración sea increíble, pues existen muchísimos juegos "completos" que no llegan a tanto. Además hay que recordar que tenemos muchas misiones adicionales y por supuesto el modo online (que aunque yo no lo uso porque no tengo internet en la consola, sé que a muchos les encanta).
Gráficamente está en la línea de GTAIV, mejorando además lo visto en The Lost and Dammen en lo referente a la gente que veremos por la calle, ya que como dije en su entrada correspondiente, tenía muy poca actividad peatonal y de coches, algo que se ha solucionado en este segundo episodio.
Como siempre, las voces están en inglés, y por mucha que la supuesta prensa especializada diga que en este juego es mejor así que con un doblaje al español, no es así... y más cuando estás de lleno en una misión y no te puedes permitir mirar los subtítulos para saber que dicen, pues un segundo en el que no mires puede bastar para que te acribillen o te estrelles con el coche. Pero en fin, a ver si en GTAV... aunque lo dudo.
En cuanto a la música, ha mejorado notablemente, y eso que no me gustan los temas del original y el primer episodio, pero esta vez sí que los hay buenos, de esos que se te pegan, con mención especial para la cancioncilla esa que canta un niño, o eso parece xD Durun deru durunda~~~~ xD Además de temas tan conocidos cantados en español que seguro que todos reconoceréis.
Y nada más, aquí lo dejo. Sólo decir por último que me ha encantado The Ballad of Gay Tony, y que ojalá otras compañias sacasen expansiones así, y no las porquerías que sacan. Tanto The Lost and Dammed como The Ballad of Gay Tony son grandiosas expansiones, que aunque el segundo supere al primero, no quita mérito al otro, pues igualmente es muy divertido de principio a fin. Ahora sólo queda esperar a ver si Rockstar muestra de una vez GTAV, que madre mía cómo tiene que ser...
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