05 agosto, 2013

The Last Story


The Last Story ha sido y muy probablemente será el último juego que compre para Wii, por lo que esta también será la última entrada que veréis con la etiqueta de Wii, o eso creo.

Empecé a jugarlo justo después de Xenoblade Chronicles, así que este título iba a tenerlo muy difícil para impresionarme, pero tengo que decir que lo consiguió.

Y es que aunque no llega al increíble nivel del mencionado Xenoblade, sí que se cuela directamente en la segunda posición de los mejores juegos de la consola gracias a un argumento muy sólido, oscuro y adulto que engancha desde el primer minuto. Tras varias horas de juego sí que tiene momentos de bajón argumental, pero no tarda en volver a despegar e ir en aumento especialmente en la recta final del juego.

El sistema de combate es directo, es decir, sin pausas y cambios de escenarios para que comience la lucha, algo que la verdad suelo preferir en los JRPGs, pues no "corta el rollo" como cuando es por turnos. Aunque está claro que si el sistema de lucha está bien hecho, poco importa que sea o no por turnos, lo importante es que se disfrute y que no te canses de realizar enfrentamientos, los cuales siempre son muy necesarios en todo juego de rol.

La mayoría de los aspectos de The Last Story son positivos, como lo que ya dije con respecto a su argumento o a sus combates, además de otros aspectos como la música, los carismáticos personajes o la multitud de misiones secundarias. Pero también hay que reconocer que tiene fallos, siendo uno de ellos por ejemplo su baja duración para pertenecer al género al que pertenece, o que los escenarios sean demasiado parecidos entre sí y que siempre estemos en la misma ciudad, sin posibilidad de salir de ella para ver qué más hay en el mundo.

Esos puntos negativos son bastante importantes en un juego de rol, pero que no impide que sea un juego sobresaliente que todo aficionado al género debería probar y disfrutar, pues lo merece. Sin duda, uno de los grandes de la consola de Nintendo.

Por último, The Last Story incorpora un modo online que consiste en unirte a otras personas y justas derrotar a un enemigo de gran poder. Es solo eso, vencer a un enemigo concreto y fin, nada de avanzar por el escenario. Lo probé dos veces y lo dejé, porque me aburrió como pocos modos online lo han hecho, pero hay que tener en cuenta que es un mero extra sin pretensiones de llegar a nada ni que se hable de él. Lo que importa es su modo campaña, y en eso es estupendo.


NOTA: 93

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